Escrito por: Daniela Patricia Pérez Vásquez
Para sorpresa de nadie, el departamento de Sucre enfrenta una serie de desafíos significativos que afectan su desarrollo competitivo. Según el Índice Departamental de Competitividad (IDC) presentado por la Universidad del Rosario hace pocas semanas, Sucre muestra un rendimiento bajo en varios indicadores críticos, lo que pone de manifiesto la necesidad de una intervención estratégica y decidida para mejorar su competitividad y, en consecuencia, el bienestar de la población.
Uno de los principales problemas que enfrenta Sucre es su baja autonomía fiscal, pues depende en gran medida de las transferencias nacionales para obtener sus recursos. Recursos que, además, según el IDC, no son usados de forma transparente: el estudio nos ubica en el puesto 31 de 33 en cuanto a la transparencia en el uso de regalías. Esta dependencia y el cuestionable uso de los recursos, explicaría la limitada capacidad del gobierno departamental para implementar políticas públicas ajustadas a las necesidades reales de los sucreños.
En términos de infraestructura, Sucre también enfrenta importantes retos. La conectividad aérea del departamento es limitada, y lastimosamente esta es una condición clave para el desarrollo económico, facilitando el comercio, el turismo y la inversión desde otras regiones del país. Mejorar la infraestructura vial y de servicios es crucial para aprovechar al máximo esta conectividad y permitir un flujo más eficiente de bienes y personas.
La innovación es otra área donde Sucre muestra un desempeño deficiente. El hecho de no haber registrado concesiones de modelos de utilidad ni patentes en los últimos años refleja poca actividad en innovación tecnológica y en investigación. La innovación es motor clave para el desarrollo económico y social, y Sucre necesita fomentar un ecosistema que apoye la creatividad y el emprendimiento. Esto podría incluir incentivos para la investigación y el desarrollo, así como programas de capacitación en habilidades tecnológicas avanzadas.
En cuanto al sector educativo, en Sucre, los puntajes promedio en las pruebas SABER 11 de 237 en colegios oficiales se encuentran en el rango de los más bajos a nivel nacional. Esta situación requiere una intervención urgente para mejorar la calidad de la enseñanza. Invertir en la formación de docentes, infraestructura escolar y programas de apoyo para estudiantes puede contribuir a elevar los estándares educativos y preparar a la juventud para competir en un mercado laboral cada vez más exigente. En este mismo sentido, el dominio del inglés en Sucre es muy bajo, con solo el 5.3% de la población con conocimiento del idioma. En un mundo globalizado, el inglés es una herramienta esencial para acceder a oportunidades educativas y laborales. Programas de enseñanza de inglés desde temprana edad pueden marcar una diferencia significativa en la competitividad futura del departamento.
A nivel global, el departamento bajó una posición en el IDC, ocupando el puesto 24 de 33. Este puntaje evidencia grandes retos en varias áreas y se traduce en una menor capacidad para atraer inversiones y generar empleo. Para cambiar esta realidad, es necesario un enfoque integral que aborde los factores estructurales que limitan la competitividad del departamento, esto incluye mejorar la infraestructura y la calidad de la educación, fomentar el emprendimiento, y fortalecer las instituciones públicas.
En conclusión, la falta de autonomía financiera representa un obstáculo para la planificación a largo plazo, el ahorro y la inversión en infraestructura. La corrupción y la mala gestión de los fondos públicos son barreras significativas para el progreso, y es crucial implementar mecanismos de transparencia y rendición de cuentas rigurosos. Fortalecer la red de transporte, junto con inversiones en energía y telecomunicaciones, puede catalizar un crecimiento económico sostenido y atraer inversiones que potencien sectores clave como el agroindustrial y el turismo. Para ello, es fundamental un esfuerzo conjunto entre el gobierno local, el sector privado y la comunidad, enfocándose en proyectos que ofrezcan soluciones integrales y sostenibles a largo plazo.
Sobre la autora
Daniela Patricia Pérez Vásquez
Daniela es Profesional en Relaciones Internacionales, especialista en Gobierno y Gestión Pública Territoriales, y Candidata a Magíster en Políticas Públicas de la Universidad de Los Andes.